Preparación del suelo: en este proceso se debe, limpiar el suelo de maleza, y el arado de la misma con el motivo de airear más la tierra, ayudando al mejor desarrollo de las raíces. 

Siembra: dentro de la siembra se tiene que tener en cuenta la distancia de siembra y densidad poblacional, donde en promedio debe ser aproximadamente entre 16 a 20 pulgadas.

Etapas de desarrollo del cultivo: en este proceso se encuentran dos la vegetativa, donde se desarrolla el tallo y las hojas principales, de igual manera el crecimiento de la raíz, el segundo proceso es el reproductivo, el cual se caracteriza por ser el momento de la floración, Formación de vainas, llenado de vainas y maduración, este dura alrededor de 45 días después de la finalización de la floración. (IICA,2009). El frijol es un cultivo que puede ser sembrado tanto como monocultivo como pilocultivo; pero existe una práctica mesoamericana, la cual lo usaba como policultivo, entre el maíz y la cabaza, cada uno aportándole nutrientes beneficiosos a los otros (Ebel, Pozas, Soria, Cruz, 2017). La cosecha del frijol es manual y se da cuando el grano presenta una humedad del 30 al 50%, los cuales después se disponen a ser secados. (IICA,2009). Dentro de los requerimientos nutricionales del suelo, son nitrógeno y potasio, mientras que se debe controlar las cantidades de fosforo, la temperatura óptima para su desarrollo es 24ºC, y su necesidad en precipitación es 200 mm mensual. (IICA,2009).