Siembra: cuando se tiene un suelo plano se disponen las estacas con una distocia de 1m entre cada una, para tener yucas de tamaño mediano, se deben sembrar las estacas de forma inclinada.

Fertilización: es recomendable fertiliza la tierra cada nuevo lote de yucas, debido a que va perdiendo con el tiempo nutrientes esenciales Cosecha: la cosecha se realiza a los 10 meses de la siembra, para este proceso se debe limpiar el área y después si iniciar a arrancar la   yuca (Zoteyn, 2002).

La yuca usualmente se usa en un policultivo, generalmente con maíz, sin embargo, esta unión se le pueden añadir de más plantas con el fin de repeler plagas y aumentar la productividad del terreno, dentro de los posibles cultivos que también se pueden unir a este grupo se encuentran, el maní, caupi o melón (liebman,1999).

Su cosecha es manual y se da mediante el arado de las varillas, donde se separa la raíz del tallo mediante el uso de una tijera o cuchillo. (Aguilar, 2017).

La cosecha de la yuca se debe hacer a los 8 o 10 meses dependiendo de la variedad que se maneje, si se cosecha antes de este tiempo el producto final será muy duro, en su proceso de recolección es importante hacer un descope o corte de hojas 8 días antes de la cosecha, eliminando todo el follaje de la planta, dejando únicamente el tallo con el propósito de engrosar las cascaras evitando rajaduras al momento de la cosecha.

La temperatura en la que la yuca puede estar oscila entre los 16º – 38ºC, la planta se adapta fácilmente a zonas húmedas como secas, aunque tiene una preferencia por lluvia abundante, su precipitación optima va desde 750 mm a 2000 mm, se puede plantar desde el nivel del mar hasta los 1000 m.s.n.m, el suelo del pH debe ser de 5.5 a 6.5. (Aguilar, 2017).