(Molina, 2019)
Abejorro

Abejorro

(Bombus atratus)

Insecto descubierto por el entomólogo e investigador estadounidense Henry James Franklin en 1913. Conocido como huanquero o abejorro, pertenece al género Bombus de la subtribu Bombina y familia Apidae, que también incluye a las abejas. En la actualidad, existen aproximadamente 250 especies de esta subtribu que tienen gran capacidad de adaptación a zonas cálidas y frías, permitiéndoles estar repartidas por todo el mundo, a excepción de Australia.  En el caso de América del Sur, estas especies de abejorros se distribuyen en lugares con distintas altitudes, desde las planicies amazónicas hasta la Cordillera de los Andes (Molina, 2019). El Bombus atratus tiene un tamaño de 9 a 22 mm de longitud, cuerpo robusto cubierto de pelos sedosos de color negro y alas castaño oscuro con reflejos violáceos. A diferencia de los machos, las hembras cuentan con un aguijón y una corbícula o canasta para polen, ubicada en la parte inferior de sus patas traseras. Los abejorros son fácilmente identificables por el fuerte zumbido que hacen al volar sobre las flores; de las cuales extraen el néctar, su principal fuente de alimentación. Estos insectos se caracterizan por ser eusociales, es decir, forman colonias a partir de una reina fundadora (de gran tamaño), abejorros obreros y zánganos (Molina, 2019).

Nombre común

Abejorro.

Otros nombres en común

Huanquero.

Nombre científico

Bombus atratus.

Familia

Apidae.

Usos

Producción agrícola.

Polinización.

¿Qué aporta al ecosistema?

 Por su forma de alimentarse, los abejorros contribuyen a la polinización de las plantas y cultivos agrícolas. Aportando así al bienestar de la fauna y flora y al desarrollo de la vida humana (Molina, 2019).

Simbología

Desde tiempo atrás, los abejorros hacían parte de la cosmovisión de la comunidad Mapuche, al sur de Chile. Se consideraba que: “con su cuerpo de gran tamaño y un intenso color anaranjado, el abejorro nativo de Chile, Bombus dahlbomii, habría sido uno de los cuatro pullomeñ: insectos en los cuales, el alma de los difuntos mapuches y en especial de los lonkos, se alojaba tras la muerte y, desde ese nuevo cuerpo, volvía cada primavera a visitar a sus parientes.” (IEB Chile, 2020).

Sin embargo, este reconocimiento al abejorro se ha venido quedando en el pasado, ya que, las comunidades mapuches de ahora lo aprecian por su belleza y como acompañante en las huertas, pero no la ven como una especie sagrada que necesita de su protección. Igualmente, su población se ha visto disminuida por la introducción de la especie de abejorros Bombus terrestris, traídos de Europa. Estos son portadores de un parásito que se deposita en la flor que polinizan, dejando infértil al abejorro nativo hembra que también llegue a esa flor (Smith, 2020).

Descripción detallada de los usos

A nivel mundial, los abejorros son reconocidos como grandes polinizadores, ya que, al acercase a las flores para extraer el néctar, su fuerte zumbido hace que el polen se desprenda y caiga sobre su cuerpo, permitiendo que sea esparcido sobre otras plantas al continuar su vuelo. Por tal razón, estos insectos se usan en la polinización de cultivos agrícolas para consumo humano, pues, “(…) incrementa la cantidad y calidad de las frutas cosechadas” (Molina, 2019), con lo que se evita tener que usar agroquímicos y hormonas en exceso. Cabe recalcar que este uso de los abejorros se puede dar por la eficacia y fácil adaptación de la especie a las diversas condiciones ambientales alrededor del mundo, con sus excepciones (Molina, 2019).

Referencias

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