La papaya es un fruto originario de América Central perteneciente al grupo de las Caricias. Es desarrollada en casi todas las áreas tropicales y para el año 2007 se estimaron 9 millones de toneladas métricas de producción mundial. (Dane, 2016). El cultivo de papaya ha experimentado una mayor importancia a nivel mundial por sus propiedades nutricionales y sus propiedades medicinales, adicionalmente no solo favorece a sus consumidores, también a sus productores quienes experimentan ganancias a partir de los 6 meses de trasplantado. Uno de los principales productores es India seguido de Brasil (Álvarez, 2010).  El cultivo de la papaya debe ser en áreas con temperaturas mayores a 20°C y lluvias distribuidas durante todo el año, suelos con alta fertilidad y bien drenados, así como una adecuada implantación de tecnologías adecuadas para el correcto desarrollo del cultivo. En Colombia la papaya se adapta a temperaturas desde los cero metros hasta los 1.600 metros sobre el nivel del mar. El agua requerida por el cultivo depende directamente a las condiciones de temperatura en las que se encuentre. Adicionalmente, es importante tener en cuenta que los cultivos de papaya están sujetos a diversas enfermedades en los periodos lluviosos del año (Dane, 2016). 

La producción en Colombia se centra principalmente en los departamentos del Meta, Magdalena, Córdoba y Valle del Cauca. Siendo la mayor parte de producción generada en el departamento de Córdoba con el 31%, seguido del meta con un porcentaje del 18% y los demás departamentos el 26% (Agronet,2017).